Rodeados de su gente y en su segunda casa recibieron ayer la Insignia de Oro los 76 abonados que este año cumplen medio siglo ininterrumpido en la entidad txuri urdin. Un acto realmente emotivo en el que los socios recibieron un merecido homenaje en el Estadio de Anoeta. El presidente de la Real Sociedad, Jokin Aperribay, les hizo entrega de la Insignia de Oro como muestra de agradecimiento, esfuerzo y fidelidad. Al acto tampoco faltaron consejeros del club realista, una representación de la Asociación de Veteranos y los capitanes del primer equipo.
Una tarde inolvidable en el que las historias, las anécdotas y los recuerdos estuvieron muy presentes. Y un año muy significativo, ya que coincide con uno de los momentos más importantes en la historia de la Real, el ascenso a Primera en Puertollano, el primer paso hacia la consolidación entre los más grandes. Fueron numerosas las vivencias que los 76 abonados compartieron con la Real. Quedará en el recuerdo de todos.
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