El concejal Markel Ormazabal (EH Bildu) ha propuesto hoy al equipo de gobierno municipal que se elabore un estudio sobre el posible proceso de concentración hostelera en la Parte Vieja y sobre sus consecuencias. La propuesta será analizada en comisión el próximo lunes. Cabe recordar que en declaraciones a Donostitik Ormazabal apuntó hace días que «cada vez es más opaco el empresariado que compra los bares» en Donostia.
“Se trata de un fenómeno que es vox populi, que también tiene su reflejo en los medios de comunicación, pero que necesita de una radiografía que permita, si fuera necesario, intervenciones por parte del Ayuntamiento o de otras instituciones en defensa del interés colectivo de la ciudadanía donostiarra», ha expresado esta mañana el concejal, quien ha vuelto a referirse a la compra del edificio de La Cueva, el más antiguo de la Parte Vieja. «No es ningún secreto la estrecha relación entre estos grupos hosteleros y el turismo y diversos alojamientos”, ha añadido.
Esta supuesta concentración de negocios en las mismas manos se traduciría en los precios de los alquileres, en el de los pintxos y «en una perdida de identidad y calidad». En este punto Ormazabal se ha referido al artículo publicado el año pasado en Sud Ouest por un crítico gastronómico «criticando precisamente que la hostelería de la Parte Vieja estaba quedando en reducidas manos y que eso estaba conllevando una perdida de calidad”.
«En la actualidad los vecinos desconocen quién es el dueño del establecimiento que está debajo de su vivienda y, por lo tanto, el único camino para solucionar problemas o desavenencias es acudir al Ayuntamiento o a la vía judicial, algo que empobrece y afecta a la convivencia”, ha añadido Ormazabal, para referirse también a la precariedad laboral y a otro fenómeno: «Mientras el 22% del pequeño comercio de la ciudad ha desaparecido esta última década, la hostelería ha crecido un 3,4 % el año pasado y los hoteles y establecimientos similares un 12%”.
«Es necesario contar con una foto real de este posible fenómeno de concentración de la propiedad hostelera en la Parte Vieja y porque ello ofrecería, si fuera necesario, un instrumento para la implantación de intervenciones públicas en defensa del interés colectivo de la ciudadanía donostiarra», ha manifestado el concejal.
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