Donostia no ha sido designada Capital Europea Emergente e Innovadora 2026, un reconocimiento del Consejo Europeo de Innovación en el que había muchas esperanzas puestas y que ha obtenido Aalborg (Dinamarca). San Sebastián ha quedado en segundo lugar por delante de Nicosia, la capital de Chipre.
El alcalde de Donostia, Jon Insausti, y la concejala de Economía y Empleo Local, Ane Oyarbide, están hoy en Turín (Italia), donde se ha dado a conocer el resultado de este certamen.
Donostia optaba a este premio en la categoría de ciudades con una población de entre 50.000 y 249.999 habitantes, dotada con medio millón de euros para el ganador. Como finalista, le han correspondido 50.000 euros.
La otra categoría, la de Capital Europea de la Innovación, se convoca para urbes que superan esa población y cuenta con una dotación de un millón de euros. La triunfadora en este apartado ha sido la ciudad francesa de Grenoble.
Insausti y Oyarbide han recogido el reconocimiento durante la ceremonia celebrada en la OGR Torino, en el marco del Cities Innovate Summit y del Eurocities Economic Development Forum.
Insausti ha subrayado que este reconocimiento confirma que el modelo donostiarra “funciona”. “Supone recoger el fruto del trabajo y las apuestas realizadas durante años, que han hecho avanzar a Donostia, apostando por el talento y la ciencia, entendiendo la innovación como una herramienta para mejorar la vida de las y los donostiarras”.
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