El Dantz Festival vuelve con fuerza este verano y ya tiene fecha: el 29 y 30 de agosto en Donostia, con el anfiteatro de Miramón como epicentro. El evento reunirá lo mejor de la electrónica internacional, estatal y local, pero si hay un nombre que brilla con luz propia es el de Sama Abdulhadi, DJ palestina y símbolo de libertad a través de la música.
Desde la escena underground de Ramala al corazón de Donosti, Sama pondrá ritmo y mensaje a una edición que quiere ser mucho más que un festival: un espacio de encuentro, cruce de culturas y defensa del arte como resistencia.
El director y fundador del certamen, Jokin Telleria, lo ha presentado este jueves en el Ayuntamiento junto al concejal de Cultura, Jon Insausti, subrayando que la música electrónica “tiene unas características que hacen falta” en la vida cultural y social, porque en su entorno “se generan espacios de libertad e innovación”.
Este año, el anfiteatro de Miramón será el corazón del festival. Un espacio que, en palabras de Telleria, es “cómodo, con muy buena acústica, muy bello y poco utilizado”, y que el festival quiere “explotar” mientras apuesta por un formato más sostenible. ¿Y si llueve? Tranquilidad: “Habrá un plan B”, asegura.
El cartel de Dantz 2025 mezcla leyendas como Octave One (Detroit), Helena Hauff (Alemania), KiNK (Bulgaria) o DJ Hell, con figuras emergentes de la electrónica vasca y estatal como Irune Muguruza, Obrium, Bitter Ama o Koldo Intermusic.
Con el lema Intersecciones, Dantz invita a romper fronteras, mezclarse y dejarse llevar. Este año, además, lanza un mensaje claro de solidaridad: “La música puede ser una herramienta poderosa para dar voz a la libertad”, dicen desde la organización, en referencia a la participación de Abdulhadi y el apoyo a Palestina.
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Y sí: habrá mucho más que música. Charlas, formación, networking y buen ambiente asegurado.
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