Esther García, Premio Donostia: «Hay más mujeres en el cine, pero los despachos siguen siendo de los hombres»

Esther García recogerá esta noche su Premio Donostia por una trayectoria de 50 años en el cine en que su brillo como productora ha dado luz a numerosos títulos, muchos ligados a los hermanos Almodóvar. «Ser la primera productora que recibe el Premio Donostia me hace especial ilusión», ha dicho esta mañana, después de comentar entre risas que cuando acude al Zinemaldi acompañando a «personas importantes» la sala de prensa está abarrotada, y no lo estaba tanto esta mañana.

«Con una película te vinculas de por vida. Y he hecho amistad con la mayor parte de la gente con la que he trabajado», ha explicado García, esencial en la cinematografía española de los últimos años, quien sin embargo también habla con naturalidad de los fracasos.

«Cuando una película no tiene éxito es muy doloroso y lleva a la frustración a muchas personas. Los productores siempre estamos en un segundo plano, nuestra imagen y nuestro ego no se deterioran tanto», ha explicado García, quien reconoce que lleva días nerviosa y le ha costado escribir el discurso que dará esta noche.

Imposible resultaba no preguntarle por Sirat, la película de Oliver Laxe que ganó en Cannes el Premio del Jurado y ha sido preseleccionada para los Oscar. Ella, productora del título, se ha mostrado optimista. «Sirat tiene posibilidades de ser nominada y ganar el Oscar. Es diferente, moderna, atrapa al espectador y no puedes despistarte en ningún momento. Antes de ganar en Cannes la compró Neon, la distribuidora, artífice de campañas como ‘Parásitos’ o ‘Anatomía de una caída’. Y todas ganaron. Ir de su mano nos coloca en buena posición. Queremos el Oscar y vamos a luchar», ha dicho la segoviana.

En otro momento de la rueda de prensa se le ha preguntado si le pesaba haber ignorado algún proyecto que le ofrecieron, y ha respondido sin dudar: ‘Vacas’ de Julio Médem.

Mujeres y cine

García también ha sido cuestionada sobre la situación de la mujer en el cine. «Antes era difícil entrar en un equipo. Podías ser sastra, script o secretaria de dirección. Montadoras, pocas. A mí me hubiera gustado hacer cámara, pero esa posibilidad no existía, así que trabajé y aprendí para que otros confiaran en mí. Hasta que encontré a los hermanos Almodóvar que me colocaron en un lugar que me ha permitido ser la persona que soy». Y ya lleva con ellos 39 años en El Deseo. «Eso marca».

Si bien la situación de la mujer hoy día es otra, reconoce que falta dar algunos pasos. «El porcentaje de mujeres en el sector ha subido mucho, pero los despachos de plataformas y televisión siguen siendo de los hombres. Y ahí se toman grandes decisiones».

García también ha defendido que la suya, la producción, es una profesión muy creativa: «Elegir un guion ya lo es. Y buscar talento en cada historia o una idea o seguir a una directora que ha hecho un corto… es algo muy excitante». Pero también ha reconocido (y así se lo advierte a las nuevas generaciones de cineastas) que producir una película es, ante todo, negociar.