El alcalde de Donostia, Jon Insausti, ha defendido la gestión municipal del desalojo del edificio Agustinos de Martutene, asegurando que la intervención ha permitido “desatar un nudo” que, según afirma, llevaba tiempo generando inquietud en el entorno. Tras hablar con vecinos del barrio, el alcalde sostiene que “a un problema concreto se le ha dado una solución” y que se ha hecho “de manera profesional y técnica”, teniendo en cuenta que se trataba de personas “muy vulnerables” y que no existían decisiones fáciles ni definitivas.
Insausti ha explicado que el Ayuntamiento identificó a 82 personas en situación de especial fragilidad y que a todas ellas se les ofreció un itinerario personal de inclusión social y laboral. De ese grupo 48 han aceptado entrar en el proceso y están ya alojadas en La Sirena, el recurso municipal de Ondarreta, donde se está realizando un acompañamiento continuado y adaptado a cada caso.
Según el alcalde esta atención individualizada responde a situaciones muy diversas y se basa en combinar acogida, seguimiento y unas normas básicas de convivencia propias de un equipamiento público.
El edificio
Respecto al edificio Agustinos, el alcalde ha recordado que es propiedad del Gobierno Vasco y que se activará allí una oferta de Formación Profesional vinculada al proyecto Ortzadar. Su puesta en marcha, que según ha reflejado el alcalde espera sea lo antes posible, permitirá ofrecer “una respuesta más global e integral” a quienes necesitan apoyo para avanzar en su proceso de inclusión.
Insausti ha querido también subrayar que el Ayuntamiento y Herrera Sarea comparten, pese a los desencuentros, un objetivo esencial: “que no haya ninguna persona durmiendo en la calle”. Admite que hay diferencias sobre los procedimientos, pero ha insistido en que la finalidad es la misma y que la confrontación “no ayuda” en un asunto tan sensible.
A su juicio, si el Ayuntamiento pone recursos, también debe establecer condiciones y garantías para que los procesos funcionen, porque “la respuesta técnica y profesional tiene un fin: la inclusión social y laboral”.
“Quien quiera entrar en ese itinerario encontrará ese acompañamiento”, concluyó el alcalde, reivindicando que la actuación ha sido “clara, transparente y centrada en ofrecer soluciones”.



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