Una familia del barrio donostiarra de Zubieta ha denunciado ante la Ertzaintza un nuevo ataque este fin de semana, después de que las cuatro ruedas de su coche aparecieran pinchadas durante la noche del domingo al lunes. El vehículo se encontraba estacionado en el aparcamiento público situado bajo la Sidrería Araeta.
La familia afectada recuerda que este episodio se suma a una serie de incidentes que viene sufriendo desde hace años: pintadas en su coche y en el entorno de su vivienda, pancartas ofensivas, insultos y concentraciones frente a su casa. También relata daños materiales, como roturas de retrovisores y limpiaparabrisas, rayaduras en la pintura, el incendio de la valla del domicilio y el lanzamiento de botellas.
En su momento los afectados solicitaron al Ayuntamiento de Donostia la aprobación de una moción en favor de la convivencia y contra el acoso, una propuesta impulsada por varios trabajadores municipales -compañeros del padre de familia- que finalmente no prosperó. Corría el año 2021 y el tema, para entonces, ya era viejo: se había desencadenado seis años antes.
La paz no ha sido precisamente el denominador común desde entonces hasta hoy. Tras el nuevo ataque, la familia ha interpelado directamente a la Junta Vecinal de Zubieta para que condene públicamente los hechos y muestre su apoyo a la convivencia en el barrio. “Seguir en silencio llevará a que en el futuro vuelvan a repetirse este tipo de hechos”, señalan las víctimas.
Cabe recordar que el conflicto comenzó a raíz de la mudanza de esta familia en 2015, junto a una sociedad gastronómica. La intervención de la Guardia Municipal por el ruido fue el petardazo de salida de una situación especialmente dura porque hay dos menores de por medio.
En conversación con DonostiTik.com, hace cuatro años, el padre incidía en que no quiere responsabilizar de la situación que sufre su familia a la vecindad de Zubieta, sino a «una veintena de personas» con suficiente influencia como para que otros vecinos les llamaran por teléfono y les dijeran: «Es preferible que no nos vean con vosotros».
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