Muy bien acompañado de su familia se despidió ayer un emocionado Mikel González de la afición de la Real Sociedad, donde ha dado lo mejor de su carrera como jugador. Y es que once años creciendo con su equipo merecían tanto la insignia de oro y brillantes del club como la ovación que los presentes dedicaron al […]
Muy bien acompañado de su familia se despidió ayer un emocionado Mikel González de la afición de la Real Sociedad, donde ha dado lo mejor de su carrera como jugador. Y es que once años creciendo con su equipo merecían tanto la insignia de oro y brillantes del club como la ovación que los presentes dedicaron al txuri urdin.