La empresa municipal de transportes Dbus va a licitar la renovación de 110 marquesinas de Donostia, que estarán adaptadas a la Ley de Accesibilidad. Se trata de la mayor renovación de marquesinas hasta la actualidad, que desde 2013 son gestionadas también por Dbus.
En estos momentos, la capital gipuzkoana cuenta con 563 paradas, de las que 309 son de tipo marquesina y 254 son de tipo poste. La renovación se centra en las primeras, ya que los postes están en mejor estado. Para determinar qué marquesinas son de renovación prioritaria, Dbus las ha analizado en colaboración con el Departamento de Movilidad del Ayuntamiento de San Sebastián.
La licitación incluirá, además de la instalación, reubicación, y el mantenimiento de las paradas, la explotación de la publicidad. El contrato tendrá una duración de 15 años, aunque se prevé que la instalación de las 110 marquesinas se inicie en el primer año y finalice no más allá de los primeros siete años de contrato. Se quiere emprender una renovación aproximada de 16 por año. De dichas 309 paradas con marquesina, 40 son del modelo Grimshaw (el último modelo incorporado) y 269 son del modelo 2003, a las que se refiere la renovación.
Con el objetivo de unificar y homogeneizar el mobiliario urbano de la ciudad, para la renovación de las marquesinas se optará por un único y nuevo modelo de marquesina, más funcional.
Más accesibles, y resistentes al agua
El pliego de licitación contemplará criterios de calidad, accesibilidad y diseño. Uno de los principales requisitos será que las marquesinas estén fabricadas con materiales de calidad que resistan las condiciones atmosféricas propias de la ciudad, además de disponer de un diseño vanguardista -acorde con el conjunto del mobiliario urbano- y cumplir con la Ley de Accesibilidad. Para garantizar una estética homogénea, se pretende que la nueva marquesina tenga un diseño similar al último modelo, el Grimshaw.
Las nuevas marquesinas serán más accesibles. Siempre que la parada lo permita, el acceso será tanto lateralmente, como por la parte central, con un ancho libre mínimo de paso de 90 centímetros. Asimismo, todas las mamparas serán traslúcidas y llevarán dos bandas señalizadoras de colores vivos para indicar la presencia del cristal. También incluirán información sobre el número y destino de la línea en lenguaje braille, y tendrán un banco con apoyo isquiático.
Asimismo, el plan contempla una revisión integral del resto de marquesinas, así como el mantenimiento de mupis publicitarios y la instalación de WCs para conductores/as.