La fuerza de las olas, que han alcanzado entre 6 y 7 metros de altura a primera hora de la mañana, ha causado daños en doce vehículos estacionados en el Paseo Nuevo de los 27 que no habían sido retirados por sus propietarios pese a los avisos que recibieron. Además el mar ha arrastrado por el paseo varias papeleras y algún banco. Al respecto el alcalde Eneko Goia ha celebrado que pese a estos desperfectos “no ha habido daños de consideración”.
Desde el departamento de Protección Civil del Ayuntamiento recuerdan que la alerta continuará vigente a lo largo de toda la jornada, por lo que el protocolo establecido como medida de precaución seguirá siendo el mismo y permanecerán cerrados el Paseo Nuevo, Paseo de Leizaola y Peine del Viento tanto para vehículos como para peatones.
La pleamar está prevista para las 18.32 horas. Goia ha pedido a la ciudadanía “precaución y que se respeten los cortes establecidos por el departamento de Protección Civil, cuya finalidad no es otra que garantizar la seguridad tanto de las personas como de los bienes materiales”.