Donostia encara una semana decisiva en su estrategia para consolidarse como referente europeo en innovación. Una delegación municipal partirá mañana hacia Turín, donde se conocerá cuál de las tres finalistas -Donostia, Nicosia (Chipre) o Aalborg (Dinamarca)- se alza finalmente con el título de Ciudad Europea de la Ciencia, el Conocimiento y la Innovación 2026.
El alcalde, Jon Insausti, ha confirmado el viaje tras la junta de gobierno local, recordando que este nuevo reto entronca con otro momento clave para la ciudad. “Si en 2016 fuimos la Ciudad Europea de la Cultura, ahora aspiramos a convertirnos en la Ciudad Europea de la Ciencia, el Conocimiento y la Innovación 2026”, señaló. A su juicio, ambos reconocimientos comparten un mismo sustrato: “Para alcanzar estos títulos hacen falta personas creativas” «políticas potentes».
Una apuesta sostenida por la ciencia
Insausti ha subrayado que la candidatura donostiarra descansa sobre una base sólida construida en los últimos años. Ha mencionado los cuatro campus universitarios y los diecisiete centros de Formación Profesional. También que se invierte el 3,7% del PIB en ciencia e innovación -muy por encima de la media de Gipuzkoa y de la CAV- y quela ciudad cuenta con 6.800 profesionales trabajando en este ámbito. Además, alberga 30 centros de la Red Vasca de Tecnología y registra una inversión media de 2.000 euros por habitante en este capítulo.
“Podemos decir que Donostia es una ciudad próspera, que ofrece certezas y garantías tanto desde lo público como para quienes desean invertir y contribuir al desarrollo económico”, ha defendido el alcalde.
Mirar al futuro
Insausti ha enfatizado que el camino adoptado debe continuar. Ha mencionado la reciente puesta en marcha del edificio de Ikerbasque, con el computador cuántico como pieza central, así como los avances en la construcción del edificio destinado a la protonterapia en el complejo hospitalario de Osakidetza.
A ello ha sumado el impulso del polígono industrial y empresarial de Eskuzaitzeta y la expansión del parque empresarial de Miramón, “nuestra joya de la corona”, hacia Illunbe y Galarreta.



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