«Los vertidos atraen a los vertidos. Eso es lo que pasa en Belartza Goikoa, donde en el relleno ilegal que se hizo con ocasión de la construcción de Mercadona y McDonald’s, proliferan ahora los depósitos clandestinos», denuncia el colectivo Eguzki, que ilustra con fotos la situación.
Eguzki pide al Ayuntamiento que elimine estos residuos y tome medidas antes de que aquello se convierta en un vertedero clandestino en toda regla. Aunque el grupo ecologista incide en que la base de este problema está en las toneladas y toneladas de piedra que siguen ahí a pesar de que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ordenó retirarlas.
Tanto Eguzki como Haritzalde acordaron en octubre pasado no volver a participar en el Consejo Sectorial de Medio Ambiente hasta que se resuelvan las situaciones en Belartza Goikoa y Lourdes Txiki generadas la pasada legislatura.
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