«2018 será el año de la movilidad eléctrica», ha afirmado esta mañana el alcalde Eneko Goia, quien ha explicado que el equipo de gobierno espera avanzar en la electrificación de la línea 28 de Dbus, «la más competitiva», que en un futuro (no este año) aspiran a que funcione al 100% con autobuses eléctricos. Por ahora estudian un sistema de carga distinto, que no sea nocturna como en la actualidad, sino durante el tránsito de los vehículos, concretamente mientras estos paran.
«La verdadera transformación de las ciudades, y también de Donostia, vendrá de la mano del transporte público sostenible y limpio», ha expresado Goia, quien además ha anunciado que el Ayuntamiento trabaja junto a Gobierno vasco y Diputación para redactar un convenio de colaboración en materia de movilidad eléctrica que incluya proyectos concretos.
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