De los 3,8 millones de euros que el Ayuntamiento donostiarra tenía previsto gastar en electricidad este año (sin contar los organismos como Donostia Kultura y tantos otros de carácter municipal), ha pasado a calcular que cerrará el ejercicio con un gasto cercano a los 5 millones según ha explicado hoy el alcalde Eneko Goia. Quien también ha advertido de que para el año que viene plantearán un presupuesto, en electricidad, de unos 6,3 millones.
«La lectura de estos datos nos obliga a hacer algo«, ha respondido el alcalde cuando ha sido cuestionado acerca del plan de ahorro impulsado desde el Gobierno central hace unos días. Goia no conoce con detalle las medidas y su impacto en la ciudad, pero sí comparte la preocupación de fondo.
«Hay que adoptar medidas de contención y de ahorro de forma sensata y sin poner en cuestión la seguridad, que debe ser el elemento más importante». En este punto ha incidido el alcalde en que le preocupa bastante más que las calles estén iluminadas a que lo estén los monumentos.
Arantxa Tapia «por delante»
Por su parte la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ha sido entrevistada esta mañana en el programa “Faktoria” de Euskadi Irratia, donde ha subrayado que Euskadi cuenta ya con un Plan de Contingencia Energética encarrilado, alineado con Europa y la Ley de Sostenibilidad de 2019. “Antes de que el Estado mencionara nada, en Euskadi empezamos a trabajar en el plan siguiendo las directrices marcadas por Bruselas”, ha remarcado.
De esta forma la consejera ha explicado que ya hay varias medidas en marcha y que en septiembre entrarán en vigor las que se acordaron el pasado viernes entre varios departamentos del Gobierno, las diputaciones forales y Eudel. “No se trata de medidas efectistas y momentáneas, sino de medidas a largo plazo que realmente consigan reducir el consumo y aumentar la eficiencia energética”, ha señalado.
Además ha subrayado que el plan de contingencia de Euskadi va más allá de la climatización y la iluminación, y que las medidas se deben establecer con cautela “porque no es lo mismo una residencia que un polideportivo”. “Las administraciones debemos dar ejemplo, implantar programas dirigidas a las empresas y a la movilidad y sensibilizar a la población «, ha añadido.
Lo que no es de recibo es que con la cantidad ingente de turistas que está abarrotado la ciudad no recaudemos para mejorar en algo a los donostiarras. Hay que cobrar algún tipo de tasa extra por la luz y la basura que generan, a ellos no les va de un euro por persona y a nosotros nos ayudaria mucho.