Mientras el Plan Especial de Protección del Patrimonio Urbano Construido (PEPPUC) esté en tramitación y se decida qué edificios deben ser protegidos no podrán efectuarse determinados derribos en Donosti, tal y como explicó el concejal de Urbanismo Sostenible, Enrique Ramos, que puso el ejemplo de lo ocurrido con las villas de Ondarreta (una demolición fue impedida, pero en otros tres casos había interés por efectuar algo similar).
Mientras, se trabaja paso a paso: un arquitecto especialista (Jon Chávarri) revisará las fichas que quedaron fuera del documento aprobado la pasada legislatura; una especialista en Arte (Ana Aizpiri) volverá a estudiar todas las fichas y decidirá si merece que haya nuevas incorporaciones; otro experto analizará el valor de los restos militares y un último estudiará los caseríos y su posible incorporación, o no, a la lista de patrimonio protegido.
Con todo ello cabe esperar que en noviembre haya un primer documento para renovar el PEPPUC, que será remitido a las entidades interesadas y debatido en el pleno municipal. Tras esta aprobación comenzará el plazo de alegaciones.
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