Con autoridad ha ganado el Partido Nacionalista Vasco las elecciones al Parlamento en los tres territorios y sin perder votos respecto a las elecciones autonómicas de 2012, mérito que no ha podido lograr ninguna de las otras formaciones políticas a causa de la irrupción de Elkarrekin Podemos, cuya llegada ha sangrado en mayor o menor medida a sus adversarios políticos. Como ejemplo basta con hablar del Partido Socialista de Euskadi, que ha perdido siete escaños respecto a hace cuatro años. El mapa en Euskadi queda así: PNV ha obtenido 29 escaños (necesita 38 para gobernar), 17 EH Bildu (que pierde cuatro escaños respecto a 2012), once Elkarrekin Podemos, nueve el PSE y otros nueve el PP (que pierde un escaño respecto a hace cuatro años).
En Gipuzkoa, como ya auguraban las encuestas, es donde menos distancia guarda el PNV respecto al segundo partido, EH Bildu. Concretamente han sido nueve los escaños que ha obtenido el PNV, ocho EH Bildu, tres escaños Elkarrekin Podemos y otros tres el PSE. El Partido Popular se queda con dos.
En Bizkaia el PNV ha arrasado con doce escaños y a gran distancia le siguen EH Bildu con cuatro escaños, Elkarrekin Podemos con cuatro, tres el PSE y dos escaños para los populares.
En Álava también gana el PNV con ocho escaños respecto a los cinco del PP, empatado con los cinco de EH Bildu, cuatro Elkarrekin Podemos y tres el PSE.
En los próximos días comenzarán las negociaciones entre partidos capitaneadas por el PNV, que necesita 38 escaños y parte de 29. Esos nueve que le faltan le llegarían partiendo de acuerdos que se antojan fáciles a primera vista.
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