Guardia Municipal y Ertzaintza desalojan desde primera hora de la mañana el inmueble de Moraza 1, ocupado por personas de distintas nacionalidades dando lugar a situaciones denunciadas en varias ocasiones por los vecinos de Árbol de Gernika. El inmueble está ocupado por unas 40 personas de distintas nacionalidades. Posteriormente se ha sabido que ha habido un detenido y que el edificio será sellado.
A raíz de una supuesta agresión sexual a primeros de mes el alcalde Eneko Goia, cuestionado al respecto, expresó que «no es una situación sencilla porque se trata de una propiedad privada. Hemos tenido relación con los vecinos del entorno, conocemos la situación y nos preocupa mucho y nos ocupa». Y añadió que procederían al desalojo de Moraza 1 en cuanto llegara la orden correspondiente, pero que hasta entonces el Ayuntamiento no podía dar más pasos.
Esta misma mañana, a las 8 horas, salían algunos de los ocupantes con sus enseres personales bajo la vigilancia de agentes de la Guardia municipal y la Ertzaintza en una operación que lleva la primera. También colabora la Policía Nacional para comprobar si hay infracciones relacionadas con la ley de extranjería. Según fuentes municipales el desalojo se hace en virtud del informe de salubridad del edificio que presentó el Ayuntamiento.
En lo que se refiere a los propietarios de Moraza 1 cabe recordar que en su momento hubo interesados en comprar este edificio que se encuentra en una céntrica y envidiable ubicación, pero su incierta propiedad echó por tierra el proyecto.
Concretamente los pisos segundo, tercero y cuarto son de familias que abandonaron las viviendas hace muchos años. El 55% restante pertenece a una empresa que ha sufrido embargos y tiene deudas con la Administración.
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