Agentes del Servicio de Investigación Criminal de la Ertzaintza en Gipuzkoa han llevado a cabo un operativo policial a lo largo del pasado fin de semana dirigido al desmantelamiento de un grupo criminal dedicado a la distribución de cocaína en la comarca de Donostialdea. Este grupo estaba siendo investigado por la Ertzaintza desde el primer trimestre de 2018, según ha informado el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco.
Cuatro personas, tres varones nacionales y una mujer de origen cubano, todas ellas residentes en Donostia, fueron detenidas a lo largo de la jornada del sábado en dicha ciudad, según el relato del Departamento. Por otro lado, otros dos varones, padre e hijo, de origen colombiano lo fueron en su localidad de residencia, Lasarte-Oria, en la mañana del domingo. La franja de edad de las personas detenidas abarca desde los 27 a los 52 años. La operación ha permitido la incautación de 1,550 kilos de cocaína, que en el mercado hubiera alcanzado un valor superior a los 90.000 euros.
Además de la droga, en los registros practicados en cinco domicilios de Donostia y Lasarte-Oria, además de en un bar del barrio de Gros de la capital guipuzcoana, los investigadores intervinieron más de 50.000 euros en metálico y 4,5 kilogramos de diferentes sustancias destinadas al corte y adulteración de la droga, tales como glutamina, cafeína, creatina y fenacetina.
Estas sustancias fueron localizadas, junto a diferentes elementos empleados en la manipulación de la droga, tales como una prensa hidráulica, troqueles, una envasadora al vacío, balanzas electrónicas de precisión y bolsas para envasado, en una vivienda ubicada en el barrio de Egia de Donostia, que era utilizada por el grupo a modo de laboratorio para la manipulación y dosificación de la droga para su posterior distribución.
‘Auto-servicio’
Resulta curioso que el morador de dicha vivienda, ante la reiterada presencia de consumidores en su domicilio para la adquisición de la cocaína, había ideado un sistema de auto-servicio, mediante la colocación de un pequeño depósito en el interior del buzón de correos instalado en el portal del inmueble. De este modo, mediante el uso de las llaves facilitadas a los compradores, éstos accedían a la droga, incluso cuando el traficante se encontraba ausente.
Además de lo reseñado, en los registros realizados se procedió a la ocupación de varios ordenadores portátiles, diferentes terminales de telefonía, una pistola ‘taser’, una pistola detonadora y un vehículo todo terreno.
Por otro lado, en un local alquilado por uno de los integrantes del grupo, ubicado también en el barrio de Egia, los agentes localizaron un bidón conteniendo 30 kilogramos de cafeína.
Las evidencias obtenidas han permitido establecer que la droga incautada formaría parte de los, al menos, 10 kilogramos de cocaína que este grupo habría adquirido y distribuido a los largo de los últimos seis meses.
Tras la puesta a disposición judicial de los detenidos la mañana del pasado martes, la jueza Instructora decretó el ingreso en prisión de los tres cabecillas del grupo: dos varones y la mujer. Para el resto se articularon otras medidas cautelares, tales como la retirada de pasaportes y la presentación periódica en desde judicial.
