San Sebastián, 30 jun (EFE).- La imagen de los dos alardes, el tradicional y el mixto, se ha vuelto a repetir este lunes en Irun (Gipuzkoa) para celebrar su día de San Marcial, en el que las altas temperaturas y el calor asfixiante han sido protagonistas también de una jornada en la que la ciudad entera se ha echado a la calle.
Hacia las 8.30 de la mañana, unas dos horas antes de que el alarde mixto arrancara, han abandonado la plaza de San Juan los integrantes del alarde tradicional, tras escuchar el himno de San Marcial y recibir el saludo de las autoridades desde el balcón consistorial.
En 2024, la alcaldesa, la socialista Cristina Laborda, en su primer año en el cargo, se estrenaba recibiendo al desfile mixto, un gesto que su antecesor, José Antonio Santano, había llevado a cabo por primera vez un año antes.
Respeto y convivencia
Laborda también lo ha hecho hoy y, en declaraciones posteriores a los medios informativos, ha deseado a la ciudadanía que disfrute la fiesta «desde el respeto y la convivencia».
Preguntada por si desea la celebración de un único desfile, ha señalado que «en Irun existen dos formas de vivir el alarde, las dos desde la legalidad», por lo que «esa es la manera en que el 30 de junio los irundarras celebran el alarde, desde el lugar en el que quieren vivir».
Todos los participantes habrán echado de menos este año los cielos cubiertos y amenazando lluvia del año pasado, pues el calor ha sido fuerte desde la arrancada del desfile tradicional a las 7.40 horas, con los termómetros por encima de 20 grados, temperatura que ha rozado los 30 grados a la salida del mixto, sobre las 10.20 horas.
Medios locales han cifrado en más de 6.800 los integrantes del alarde tradicional, que sigue siendo el mayoritario, aunque el mixto, en el que las mujeres también ejercen de escopeteras, ha estado formado por 13 compañías, una más que el año pasado, cuando las conformaron unas 2.200 personas.
A la llegada del desfile mixto a la plaza mayor, se han escuchado los típicos ‘irrintzis’ y ‘gora Irun’, además de gritos de «Emakumeak alardean» (las mujeres en el alarde).
Una vez que ha llegado la General a caballo, Maite Bergara -que se ha despedido por ser su último desfile- y también el resto de mandos del alarde mixto, se ha desarrollado el habitual paso de hacheros por los soportales del consistorio, seguidos de la banda y la tamborrada, así como la tradicional imposición de la bandera de la ciudad.
Tres descargas de escopeta han marcado el final de este segundo desfile, sobre las 11.30, lo que ha dado por concluidos los dos alardes en un ambiente extremadamente caluroso pero de normalidad.
Diversos representantes políticos e institucionales se han desplazado a Irun para apoyar a quienes defienden la participación igualitaria en el alarde, entre ellas, las máximas responsables del Instituto Vasco de la Mujer, Emakunde, y del Arateko, que han reiterado sus llamamientos a trabajar por la igualdad en el municipio.
Afianzar los avances
La directora de Emakunde, Miren Elgarresta, ha considerado importante «consolidar y afianzar los avances hacia la igualdad que se van percibiendo en los últimos años» en el alarde de Irun y ha abogado por aprovechar «este nuevo escenario de oportunidad para seguir dando pasos a favor de la igualdad a través del diálogo, el acuerdo y la colaboración».
La ararteko en funciones, Inés Ibáñez de Maeztu, ha acudido a la fiesta para apoyar «el derecho de las mujeres a participar en el alarde» y mostrar con su presencia «la defensa inequívoca del derecho de igualdad de las mujeres en las fiestas y en todos los ámbitos».
La dirigente de EH Bildu de Gipuzkoa Maddalen Iriarte ha criticado «la equidistancia» de quienes se refieren a los alardes como reflejo de «dos sensibilidades», puesto que en su opinión todos los irundarras deben poder «participar en igualdad de condiciones» en el desfile.
La concejala de Irun de Podemos Euskadi Tania Pazos, en unas declaraciones hechas junto a los responsables de la formación morada en Euskadi Richar Vaquero y Miren Echeveste, ha proclamado su adhesión a «la petición de la junta de mandos del alarde igualitario de que el Ayuntamiento organice» un sólo alarde para toda la ciudadanía en el que «no se discrimine a nadie».



Deja un comentario