Tras dos años de movilizaciones y reivindicaciones, el personal del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento de Donostia ha decidido poner fin a su ciclo de protestas tras recibir una propuesta concreta del Ayuntamiento para la ampliación de plantilla.
Durante este tiempo, los bomberos han denunciado deficiencias estructurales en el servicio y han hecho llegar al Consistorio propuestas concretas para su mejora. La principal reivindicación ha sido clara desde el principio: reforzar la plantilla. Esta semana, en el marco de un encierro de tres días acompañado de protestas y debate interno, se ha producido el primer gesto de avance por parte del Ayuntamiento.
La propuesta recibida plantea la incorporación de 12 nuevos efectivos: seis en 2026 y otros seis en 2027. Aunque el colectivo reconoce que la medida no resuelve todas las carencias del servicio, valora el compromiso como un primer paso importante. “Es un punto de partida”, han señalado en rueda de prensa, donde también han expresado su disposición a seguir colaborando en la búsqueda de soluciones a largo plazo.
Los bomberos recuerdan que, incluso con estas incorporaciones, los ratios seguirán siendo inferiores a los de otras ciudades como Bilbao o Vitoria, y por debajo de lo recomendado para cubrir con garantías los municipios que atienden, entre ellos Donostia, Hernani, Lasarte-Oria, Usurbil, Astigarraga, Urnieta y Pasaia.
En este sentido, lamentan que el reciente acuerdo entre el Ayuntamiento y la Diputación Foral de Gipuzkoa no haya abordado con más ambición la situación del servicio. Aun así, han tendido la mano a ambas instituciones para seguir avanzando conjuntamente.
El colectivo ha querido agradecer el apoyo recibido por parte de la ciudadanía durante este largo proceso, y ha reiterado su compromiso con un servicio público de calidad. “Seguiremos trabajando a fuego lento para mejorar el servicio y estar a la altura de lo que merece nuestra sociedad”.
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