San Sebastián, 21 may (EFE).- El Ayuntamiento de Orio ha decidido suspender este año la fiesta del besugo, que desde 2008 se celebra anualmente en julio, ante la incertidumbre sobre el estado de la especie, entre otros inconvenientes, como la falta de una empresa de catering.
La alcaldesa de Orio, Anuska Esnal, y representantes de la organización del evento han anunciado este miércoles que la fiesta no se podrá llevar a cabo en 2025.
El técnico de turismo de Orio, Adrián García, ha explicado que la fiesta se sostiene sobre tres ejes, los parrilleros, el género y la empresa logística que organizaba el restaurante en la plaza, tres bases sobre las que existe «incertidumbre».
En primer lugar, para los parrilleros representa un esfuerzo dejar sus restaurantes llenos y acudir a la plaza para cocinar en la fiesta.
Además, respecto al besugo, «la salud de la especie ha empeorado en los últimos años y, aunque no esté en peligro, hay que traerla cada vez más lejos, con la incertidumbre que ello conlleva y el encarecimiento de los precios».
Por último, ha explicado que la empresa de catering que se encargaba de la logística comunicó el pasado año que no volvería a participar en la fiesta, por lo que el Ayuntamiento ha buscado un nuevo proveedor, sin éxito.
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