(EFE/Redacción). La dirigente de Podemos Euskadi Pilar Garrido ha instado hoy a «todas las fuerzas políticas» y a los ciudadanos vascos a protagonizar «una gran movilización social» que «mueva» al Gobierno de Iñigo Urkullu a «reforzar» la plantilla de Osakidetza para poder hacer frente a la actual situación de la pandemia. Se suma esta reivindicación a la de los sindicatos de días atrás, que han convocado manifestaciones en las tres capitales vascas el próximo 23 de enero.
La coordinadora general de Podemos Ahal Dugu ha hecho estas declaraciones a los medios informativos este viernes delante del ambulatorio de Gros de San Sebastián, donde su formación ha instalado una de las mesas de recogida de firmas con la que ha dado inicio a su campaña «Tu salud está juego».
Tal y como anunció la coalición morada ayer en un comunicado, Garrido ha explicado que mediante mesas colocadas en diferentes municipios vascos, a las puertas de hospitales y centros de salud, y también a través de su página web «www.podmos.eus«, Podemos ha dado inicio a una campaña para exigir al ejecutivo autonómico más personal en el Servicio Vasco de Salud que mantendrá durante este mes de enero.
«Osakidetza está en una situación de colapso», ha denunciado la líder de Podemos, quien ha llamado «a todas las fuerzas políticas y a la ciudadanía a implicarse» para «sacar adelante» el sistema sanitario público de Euskadi, «una joya de la corona» -ha dicho- que «está en juego».
Ha insistido en que resulta «urgente» reforzar la plantilla de Osakidetza recuperando a «los 4.000 sanitarios despedidos» en octubre pasado, cuando se redujo la incidencia de la covid-19, y que ahora resultan «más necesarios que nunca» para encarar la sexta ola de la pandemia.
Por su parte la pasada semana los sindicatos SATSE, ELA, LAB, CCOO y UGT convocaron marchas para el 23 de enero a las 12 que, en el caso de Donostia, partirá del Boulevard.
Los sindicatos inciden en que «hace apenas dos meses Osakidetza decidió prescindir de 4.000 profesionales», que «hace unos días se exigió al personal residente trabajar gratis», que «la plantilla soporta una tasa de temporalidad que roza el 60%», que «se han desmantelado los equipos de vacunación y rastreo«, que «no se sustituyen bajas, vacaciones y otras ausencias», que «se ha decidido restringir los horarios de centros de atención primaria»… y un largo etcétera.
