Siete familias inquilinas de Gipuzkoa -entre ellas personas mayores y hogares con menores a su cargo- han conseguido prorrogar sus contratos de alquiler ya vencidos gracias a las disposiciones recogidas en la Ley de Vivienda estatal, según ha informado la plataforma Stop Desahucios.
En municipios declarados como zonas tensionadas como Errenteria, Irun y Lasarte-Oria, se han concedido prórrogas automáticas de un año -hasta un máximo de tres- a cuatro familias cuyos arrendadores se negaban a renovar sus contratos. En todos los casos los inquilinos tenían los pagos al día y se encontraban en situación de vulnerabilidad reconocida.
En Donostia, a pesar de que su declaración oficial como zona tensionada aún está pendiente de publicarse en el BOE -previsiblemente se hará en julio-, ya se han aplicado prórrogas extraordinarias en varios casos como el de Fincas Ugalde, un gran tenedor que ha aceptado la extensión del contrato de José Antonio, residente en la Parte Vieja desde 2012. También han prorrogado sus contratos Blanca, de 70 años, y Fernando, de 73, siempre según la información de Stop Desahucios.
El índice de precios, pendiente
Desde Stop Desahucios reconocen un “balance positivo” en la aplicación parcial de la Ley, aunque denuncian como “inadmisible” el retraso en la publicación del índice de precios del alquiler, una herramienta necesaria para aplicar topes a las rentas impuestas por grandes tenedores.
La plataforma advierte de que sin el índice no es posible aplicar plenamente la Ley en zonas tensionadas, congelar precios de pequeños propietarios ni establecer las rentas de referencia para nuevos contratos.
Malas prácticas
Stop Desahucios también denuncia un aumento de asesoramientos interesados a pequeños propietarios para evitar renovaciones mediante falsos contratos de temporada o el cambio de uso a vivienda turística, incluso cuando los inquilinos mantienen su residencia habitual. Recuerdan que esta práctica puede constituir un fraude legal y animan a las personas inquilinas a conocer y ejercer sus derechos.



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