La del miércoles 2 de junio de 1926 no fue una fecha cualquiera para San Sebastián. Ese día se abrieron a la ciudadanía por primera vez las puertas del parque Cristina Enea y la ciudadanía pudo recorrer los caminos y bosquetes que inundan la que fue una de las posesiones más apreciadas y queridas de los duques de Mandas, María Cristina Fernanda Brunetti y Gayoso de los Cobos y Fermín Lasala y Collado. El matrimonio falleció sin descendencia y el 5 de mayo de ese mismo año el Ayuntamiento de San Sebastián tomó posesión efectiva de los terrenos.
Hoy, 95 años más tarde, abre sus puertas la exposición Cristina Enea. Un parque en la ciudad en el Centro de Recursos Medio Ambientales de Cristina Enea, que pretende arrojar luz sobre una figura un tanto desconocida para el gran público, la duquesa de Mandas, y sobre el proceso de construcción de la finca Cristina Enea.
“El trabajo de documentación que hemos tenido que llevar a cabo para obtener información sobre Cristina Brunetti y la construcción de Cristina Enea nos ha deparado muchas sorpresas”, ha explicado esta mañana Eneko Calvo, responsable de proyectos expositivos de la fundación.
Sus visitas al Archivo General de Gipuzkoa, el Archivo Municipal de San Sebastián y el Archivo del Museo San Telmo le sirvieron para conocer con detalle aspectos como “los planos iniciales del palacio de Cristina Enea o las facturas de compra de numerosos ejemplares de especies de plantas y árboles que salpican los rincones de la finca”. Además la numerosa correspondencia que mantuvieron los duques de Mandas mientras Fermín Lasala se encontraba lejos de su esposa, y que Calvo ha podido consultar, dibujan “un matrimonio que se quería y admiraba, y que seguía con gran interés y expectación los trabajos de construcción de su particular paraíso en la tierra”.
No obstante, y a pesar de la documentación recabada, Calvo ha declarado que aún hay “mucho que estudiar e investigar sobre la figura de la duquesa de Mandas y la finca Cristina Enea”, y que esta muestra pretende traer a la luz a una figura que ha permanecido relativamente oculta, y “encender la curiosidad por su historia”.
La exposición Cristina Enea. Un parque en la ciudad sumerge al visitante en la segunda mitad del siglo XIX donostiarra a través de una serie de paneles y textos que cuentan diferentes aspectos de la duquesa de Mandas (1831-1914) y la creación de su finca.
“La documentación a la que hemos tenido acceso para el diseño de esta exposición”, ha comentado Calvo en la presentación, “ha permitido conocer más a fondo la figura de la duquesa de Mandas, quien a menudo ha permanecido a la sombra de su marido”.
Cristina Brunetti, hija de una acaudalada y aristócrata familia, “fue una mujer muy culta, de inteligencia despierta, muy enfocada hacia la lingüística y la oratoria, una mujer con una gran determinación y fuerza de voluntad, quien, en 1871, fue socia fundadora de la Real Academia Española de Historia Natural”.
Cristina Enea fue para ella un proyecto vital, en el que involucró a prestigiosos jardineros de fama internacional, como Lecour o Pierre Ducasse, paisajistas de talla mundial, como el parisino Georges Aumont, o maestros de obras de confianza, como José Clemente de Osinalde o Domingo Eceiza, quienes se encargaron de diseñar el palacio principal, las cocinas y la capilla de Cristina Enea.
“Con esta exposición hemos querido rendir un homenaje a la figura de la duquesa de Mandas y a su legado, acercando a la ciudadanía los aspectos más desconocidos de una persona que se movió en los círculos más elevados de la aristocracia española y europea”.
“El objetivo de construir este tipo de fincas de recreo, una moda muy arraigada a finales del siglo XIX, era demostrar quién ostentaba el poder, el prestigio, la prestancia y la relevancia social”, ha explicado el historiador Carlos Rilova, quien realizó su tesis doctoral precisamente sobre el duque de Mandas. “A pesar de que cuando el padre del duque de Mandas, Fermín Lasala y Urbieta, compró los actuales terrenos de Cristina Enea el objetivo era explotarlos como el resto de caseríos de la ciudad, posteriormente fueron utilizados como un instrumento de prestigio”.
No en vano, el matrimonio tenía una gran amistad con personalidades como el presidente del Consejo de Ministros Cánovas del Castillo, que elegía Cristina Enea como residencia oficial cada vez que venía a San Sebastián, o la reina regente María Cristina, quien en verano se desplazaba a la capital guipuzcoana, de quien fue dama de confianza Cristina Brunetti, un cargo que le permitió tener un lugar destacado en la corte y acceso directo a la reina y su círculo más íntimo.
Actividades paralelas
Complementariamente a la exposición, que se podrá visitar hasta el próximo 19 de septiembre, se programarán actividades paralelas que permititán conocer mejor la figura de los duques de Mandas y la finca Cristina Enea.
La actividad El legado de los duques se desarrollará a través en un paseo guiado por el parque Cristina Enea, para conocer cómo se construyó la finca y descubrir algunos de sus rincones más especiales.
La segunda actividad paralela programada serán unas visitas guiadas a la exposición Cristina Enea. Un parque en la ciudad, a cargo del comisario de la muestra Eneko Calvo.
Ambas actividades serán gratuitas, aunque será necesario inscribirse previamente a través de la web www.cristinaenea.eus, y se desarrollarán según el siguiente calendario:
11 de julio – El legado de los duques – 11:00 h. CAS / 12:00 h. EUS
15 de julio – Visita guiada a la exposición – 17:00 h. CAS / 18:00 h. EUS
25 de julio – El legado de los duques – 11:00 h. EUS / 12:00 h. CAS
29 de julio – Visita guiada a la exposición – 17:00 h. EUS / 18:00 h. CAS
8 de agosto – El legado de los duques – 11:00 h. CAS / 12:00 h. EUS
12 de agosto – Visita guiada a la exposición – 17:00 h. CAS / 18:00 h. EUS
22 de agosto – El legado de los duques – 11:00 h. EUS / 12:00 h. CAS
26 de agosto – Visita guiada a la exposición – 17:00 h. EUS / 18:00 h. CAS
