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Escasez de profesionales

El «cambio cultural» que propone Sagardui indigna a médicos, oposición y sindicatos

La consejera, que asegura no entender la polémica, puntualiza que pasará más de una década hasta que culmine el nuevo modelo que exigirá una mayor movilidad a los pacientes para ser atendidos

Gotzone Sagardui. Foto: Radio Euskadi

(Redacción/EFE). El Sindicato Médico de Euskadi (SME), la oposición casi en bloque, LAB… las declaraciones de de la consejera Gotzone Sagardui colean. Sagardui apuntó ayer a la necesidad de «un cambio cultural y una mayor movilidad» en el futuro de cara a la atención a los pacientes.  Al respecto el SME ha expresado su «más profunda indignación» y ha sido solo el primero.

Mientras se suceden estas reacciones Sagardui ha vuelto a hablar para ‘puntualizar’ algunas de sus declaraciones. Básicamente ha asegurado en una entrevista a Radio Euskadi que no cerrará ningún ambulatorio este verano y que los cambios hacia un nuevo modelo de atención primaria y hospitalaria durarán «una década y más».

También ha dicho «no entender» la polémica. «No dije nada que no lleve diciendo durante el año y medio que llevo y hay que contextualizar, hablaba de los retos de futuro», ha argumentado, antes de recalcar que esos cambios «durarán una década y más» y se aplicarán «progresivamente».

De cara a este verano, ha aseverado que «no se cerrará ningún ambulatorio», aunque como otros años se acortarán por las tardes los horarios de atención, de forma que los centros que cierran a las 8 de la tarde lo harán a las 5 y los que atendían en invierno hasta las 5 lo harán hasta las 3 de la tarde.

Sagardui ha apuntado que la falta de médicos de Atención Primaria, así como de enfermeros, es un problema global y afectará más a las zonas rurales y ha insistido en que Osakidetza ha «contratado todo lo disponible» con ofertas realizadas «casi uno a uno», pero que «si no hay, no se puede contratar».

La consejera ha defendido que para paliar ese déficit se recurrirá a medidas como la atención telefónica, con videoconferencia cuando sea con especialistas, y un mayor protagonismo de la Enfermería.

El Sindicato Médico, indignado

El Sindicato Médico ha denunciado que «hayan tirado la toalla» al decir que los vascos «tendrán que desplazarse para ser atendidos» o «que la enfermería tendrá un papel cada vez más protagonista para resolver procesos leves y compensar, de alguna forma, la reducción de facultativos».

El Sindicato Médico ha reprochado a Osakidetza falta de previsión respecto a la cobertura de jubilaciones y ha avisado de que el diagnóstico y tratamiento es competencia exclusiva de los médicos. «En vez de reconocer la labor ingente del personal facultativo y potenciar la figura del colectivo médico, asistimos con asombro y enfado a una campaña de desprestigio de los profesionales de cara a la ciudadanía», han reprochado.

A su entender, al haber asegurado que Osakidetza oferta salarios de «3.000 euros en horario de 8 a 15 horas», pero que «hay MIR que han terminado su formación y se toman unos meses sabáticos o se van a una ONG», las responsables del servicio vasco de Salud han pretendido presentar a los médicos como «unos hippies que no quieren trabajar ni siquiera por un dineral».

También ha advertido de que la situación puede ir peor: «En el plazo de 5 años se van a jubilar unos 500 médicos en Atención Primaria y, como Osakidetza no ha sido previsora, no puede garantizar el relevo generacional de los profesionales».

EH Bildu y el «desmantelamiento»

La parlamentaria de EH Bildu Rebeka Ubera ha asegurado este jueves que el desmantelamiento de Osakidetza es consecuencia de las políticas implementadas durante años por el Gobierno Vasco y ha subrayado que la falta de planificación tiene «responsables políticos con nombres y apellidos».

La parlamentaria de EH Bildu considera que ese «cambio cultural» del que habla la consejera es «un eufemismo para no hablar de desmantelamiento, recortes y privatización».

Ha señalado que la falta de médicos de familia no es un asunto que «cae del cielo», sino que es consecuencia de las políticas desarrolladas durante años por los sucesivos departamentos de Salud.

Ha opinado que esa falta de médicos se da por el actual modelo de contratación y las condiciones laborales que se ofrecen a los facultativos jóvenes que están optando por otras especialidades o por otros sistemas de salud.

«Llevamos muchos años con recortes en las consultas en verano que se están ampliando al resto del año», ha denunciado Ubera tras exigir al Gobierno Vasco un cambio de política para mejorar las condiciones laborales del personal sanitario.

Podemos-IU y el modelo  Ayuso

La portavoz parlamentaria de Elkarrekin Podemos-IU, Miren Gorrotxategi, ha asegurado que la «privatización» del sistema sanitario público vasco no puede ser «encubierto bajo el eufemismo de cambio cultural» y ha censurado que Salud pretenda «caminar hacia el modelo de Ayuso».

La representante de Elkarrekin Podemos-IU ha tachado de «lamentables» esos planteamientos y ha asegurado que la «falta de previsión», la «dejación de la Atención Primaria», el «recorte de horarios», la «falta de recursos» y la «externalización de servicios» no es un «cambio cultural, sino una decisión política». Es el «modelo del PNV», ha criticado.

Ha afirmado que la consejera no puede «escudarse» en que faltan médicos para hablar de ese cambio de modelo, porque, la falta de sanitarios es «consecuencia de la falta de previsión».

Gorrotxategi ha considerado «muy negativo» ese «cambio cultural» que plantea Sagardui y ha opinado que se trata de un «sálvese quien pueda», de la «cultura de la privatización».

«Si pretenden caminar hacia el modelo» del gobierno de Isabel Díaz Ayuso para la sanidad pública «con nosotros no va a contar», ha zanjado.

LAB y el «hospitalcentrismo»

«No es admisible que gestores de la sanidad publica, enfermos de hospitalcentrismo, que llevan décadas menospreciando y vaciando de recursos a la atención primaria, pidan ahora un cambio cultural a la gente para que asuma que sus médicos de familia y pediatras estén cada vez más lejos». Así se ha expresado hoy el sindicato LAB .

«La supuesta falta de profesionales es un problema generado por la altísima precariedad laboral sufrida por los y
las profesionales de Osakidetza, y en este caso particular, por la nefasta política de contratación de médicas y
médicos de familia y pediatras y por la falta de inversión en atención primaria, muy por debajo de lo que destina
la Unión Europea», añade el sindicato en un comunicado.


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