«A los automovilistas no les importa de quién es la culpa de la saturación de las ITV», han expresado esta mañana los representantes del Real Automóvil Club Vasco Navarro en rueda de prensa, añadiendo que resulta «injusto» que se haya incrementado el número de sanciones a los conductores que no han podido pasar la ITV a tiempo. Y es que en lo que va de año las denuncias de la Ertzaintza en Gipuzkoa por no tener la ITV en vigor han crecido un 25%. En este sentido han animado a los afectados a recurrir al Ararteko.
El presidente del RACVN, Pedro Martínez de Artola y el director gerente del club automovilista, Eduardo Martínez, han recordado que el problema de las ITV en el Territorio era previsible: 31.000 vehículos más que hace una década con una media de edad mayor (lo que aumenta el número de inspecciones) y con pruebas más largas y complejas. «Todo ello con las mismas estaciones que hace años», han denunciado.
Navarra cuenta con 5 estaciones más que Gipuzkoa para 25.000 vehículos menos y Burgos, con casi la mitad de vehículos, tiene más del doble de estaciones (7). Y han recordado que en caso de sufrir un percance con un vehículo sin la ITV en regla, el seguro puede no cubrir los daños ocasionados a uno mismo y a terceros y recae toda la responsabilidad en el propio automovilista como si se circulase con un vehículo no asegurado.
«El Gobierno Vasco ha culpabilizado a las empresas concesionarias y a sus trabajadores por su baja productividad. Sea cual fuere el origen del problema, lo cierto es que al Gobierno Vasco le corresponde la responsabilidad de garantizar ante los ciudadanos el buen funcionamiento del servicio de inspecciones.
Medidas necesarias
En el RACVN consideran que Gipuzkoa necesita al menos dos estaciones más de ITV, que se sumarían a las tres existentes en este momento. «Tal y como hemos insistido en repetidas ocasiones, sería muy acertado que una de estas estaciones estuviera situada en Donostialdea para garantizar una seguridad mayor a los usuarios de los ciclomotores y motocicletas de baja cilindrada».
Y ante al problema abogan por medidas como el aplazamiento de las nuevas pruebas que se realizan en las estaciones ITV (la diagnosis electrónica); la sustitución de las sanciones emitidas por Ertzaintza por no tener la ITV en vigor por acciones informativas o, por ejemplo, la autorización provisional para que determinados talleres multimarca o concesionarios puedan pasar esas pruebas, siempre bajo la supervisión de la Consejería, y con un carácter excepcional dada la magnitud del problema.