Con las temperaturas de estos días y la vuelta a la calle, los donostiarras caen inevitablemente en los lugares añorados durante mes y medio. Y en un atardecer como el de ayer, que seguro eran visible y disfrutable desde muchos puntos, el Paseo de la Concha se volvió a llenar de paseantes pese a las recomendaciones de las autoridades de mantener las distancias y buscar espacios menos visitados. Y es que la desescalada regala esa libertad que hasta ahora no había. Aunque sea con cuentagotas…
Nuevos cambios en la rotonda Anoeta por los avances en las obras de la estación del topo
Se recomienda el uso del servicio de transporte público y, en caso de ser imprescindible el uso del vehículo privado,...
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