Un centenar de sensores inteligentes en contenedores de fracción resto de Gros y Amara ha permitido concluir que el margen de mejora en la recogida es grande, puesto que un porcentaje importante de los contenedores se recoge cuando su nivel de llenado es aún bajo. Por ello el 40% de los contenedores podría vaciarse con menos frecuencia sin que ello afectase al servicio y permitiría, sobre todo, dirigir ese potencial de recogida a otros puntos más necesitados. Es una de las conclusiones presentadas esta mañana por el diputado de Medio Ambiente José Ignacio Asensio y por el teniente alcalde Ernesto Gasco en la Diputación.
Extrapolando la experiencia llevada a cabo en los barrios de Amara y Gros a todo San Sebastián cabría estimar un ahorro anual de 433.620 euros. Además se reduciría el consumo de combustible y con ello las emisiones de CO2 (6,5 toneladas) mitigando así el cambio climático, disminuiría la contaminación acústica de la recogida de basura que se produce generalmente en horario nocturno (80 dB), disminuirían los costes de la gestión de la recogida y se alargaría la vida útil de los camiones de recogida y de los contenedores.
Asensio ha explicado que la gestión de los contenedores comprende no pocas acciones que van desde su compra, mantenimiento y lavado, hasta su periódico vaciado, reparación o desecho. “Es necesario impulsar la innovación mediante nuevas tecnologías en el campo de la recogida de residuos urbanos para liberar recursos, mejorar el medio ambiente y ofrecer un mejor servicio a la ciudadanía”, ha concretado el diputado.