Con una incidencia de 21,4 casos por 100.000 habitantes esta semana, la epidemia de la gripe prácticamente ha desparecido ya de Euskadi. Tal y como ha explicado esta mañana el consejero de Salud en el Parlamento Vasco, la gripe es difícilmente predecible a pesar de la labor de Osakidetza. Jon Darpón ha incidido en que en esta temporada de gripe se han dado dos circunstancias que han hecho que la situación fuera diferente a las de años anteriores. Por un lado el adelanto de la gripe y el tipo de virus (H3N2) que ha tenido una mayor incidencia en las personas mayores, pacientes crónicos y pluripatológicos, lo que ha ocasionado un incremento importante del número de ingresos hospitalarios y la necesidad de un refuerzo de profesionales y camas.
A lo largo de la intervención en la Comisión de Salud, los responsables del Departamento de Salud y Osakidetza han ofrecido cifras concretas y ha destacado que se han llegado a atender en un único día cerca de 3.000 urgencias, lo que supone el doble de la media de atenciones registradas durante el mismo periodo de tiempo en 2016.